viernes, 14 de febrero de 2020

Quitando máscaras # 4: Mi hermana


Quiero empezar disculpándome por no escribir nada en estos días. Sé que me tocaba escribir a fin de mes pero tengo una buena escusa: estaba de juerga y después trabajando.

Me fui a Lima - en teoría para descansar, relajarme y no hacer nada, unas mini vacas - pero fui vilmente estafada por mi hermana, la cual me llevó de juerga el viernes, la ayudé a hacer maletas el domingo y arreglar las cosas, porque decidió mudarse y tenía poco tiempo para alistar todo. El sábado fue día muerto porque la casa parecía the walking dead. - Debo admitir que la juerga del viernes fue épica y espero que no se repita en 5 años más. - Y regresé a trabajar como loca. SIN EMBARGO, haré doble publicación esta semana.

He decidido hacer este post sobre mi hermana. Lo cual es algo que me encanta pero sé que tengo un hermano súper celoso que me va a reclamar por no publicar de él – no te preocupes Go, lo haré en su momento – pero ahorita necesito hablar de Mana. Ella está tomando otro camino, una vez más en su vida y debo admitir que estoy recontra orgullosa de ella.



Recuerdo revisar mis fotos de pequeña y ver una foto de recién nacida, con mi mamá, Mana y Jose. Lo divertida de esta foto era la cara de asco de mi hermana. Así de bella empezó mi relación con ella. Durante algún tiempo tuve una nana que me alejaba full de mis hermanos y me mantenía apartada de todo, lo cual no permitió tener una buena relación cercana con ellos.

Pero mi hermana cuando tenía 12 se quedaba a cargo de nosotros cuando mis papás salían a hacer recados. Ella nos preparaba salchichas con puré y se encargaba que todo funcionara bien. Cuando nos mudamos a Lima compartíamos cuarto y era algo raro porque ella no usaba el cuarto hasta que yo me dormía, por lo que yo podía jugar feliz y a la hora de dormir recién compartía un poco con ella. Me encantaban sus posters de los chicos de moda que venían en revistas pegados en toda la pared. Ella lo era todo. En un época hablaba mucho mientras dormía – creo que aún lo hago – pero en esa época me sentaba en la cama, agarraba el vaso de agua de la mesa de noche y lo volteaba todo para que caiga en mi boca, solo que la distancia entre el vaso y mi boca eran unos 3 cm, por lo que me empapaba. La Manita bella renegando, cambiaba mis sábanas, mi pijama y hasta mi calzón. Al día siguiente yo no recordaba nada.



Unos días antes de venir a vivir a Aqp, unos señores que fueron a ver el depa para comprarlo, no solo nos robaron algunas cosas si no que nos estafaron y casi me llevan con ellos. – Historia para compartir en otro post – es gracias a mi hermana que hoy estoy viva y sin que me haya pasado nada malo. Quién sabe qué hubiera sido de mí.



Luego, nos mudamos y bueno ambas con distintos problemas, compartiendo cuarto, no nos llevábamos muy bien. Las dos tenemos un genio tan lindo y tranquilo que nunca teníamos discusiones – eran a diario y todas mis amigas le tenían miedo. – ¡Ufff tu causa! Amo como cocinas.

Cuando estuve en 5to de secundaria, decidió irse a Lima y ahí empezamos a conocernos un poco más, conversábamos y compartíamos momentos lindos. El año siguiente se fue a USA y esa distancia hizo que nos acercáramos más, ¿Irónico no? Ella era con quien mejor hablaba, la que estaba siempre a un mensaje de distancia, la que me apoyaba. Ella fue la tercera en saber que estaba embarazada y apoyarme al 100%. Cuando vino de visita me trajo dos maletas llenas de ropa y cosas para MP, ¡Es una loca! Es la madrina de mi hija y la ama como si fuera suya.

Nuestra relación cambió demasiado para bien y hoy en día es mi mejor amiga, la amo, es la mejor hermana que he podido tener, siempre está a mi lado escuchándome, diciendo lo que piensa, apoyándome y dando todo el amor que puede dar. Ella está más presente en mi vida que mis amigas que viven en la misma ciudad. Ella no lo es todo, pero si es gran parte. Mucha gente no entiende nuestra relación, y es que, ¿Cómo no estar ahí para la persona que más ha estado para mí? Diría que es la forma en la que me criaron, pero no, es como me formé a lo largo de los años.



Hemos pasado millones problemas, peleas, risas, carcajadas, juergas, historias prohibidas de contar, conversaciones livianas, conversaciones intensas… solo espero poder tener millones más a tu lado. Te adoro. Sé que te va a ir genial en esta nueva etapa y que pronto estaremos juntas de nuevo. Es solo cuestión de tiempo. LOVE YOU SIS.

No hay comentarios:

Publicar un comentario